Estrés de fin de año: La importancia de parar y priorizar

Brian Tracy, el célebre escritor y orador motivacional estadounidense, dijo alguna vez que nunca hay tiempo suficiente para hacer todo, pero sí para detenerse en las cosas importantes… Aquellas que proporcionan felicidad y dan sentido a la vida.

Un consejo que vale la pena poner en práctica cada vez que llega diciembre y se tacha el último mes del calendario, pues son 31 días en los que la mayoría de la gente sucumbe ante la necesidad de cumplir las expectativas propias y ajenas, comprar el regalo especial, asistir y organizar eventos varios y, como si no bastara, planificar las tan ansiadas vacaciones.

ACORDE AL ESTUDIO “EL ESTRÉS DE LAS FIESTAS” REALIZADO POR GREENBERG QUINLAN ROSNER RESEARCH Y PUBLICADO POR LA ASOCIACIÓN AMERICANA DE PSICOLOGÍA (APA), LAS MUJERES TIENDEN A ANGUSTIARSE MÁS EN LA ÉPOCA DE FIN DE AÑO, MIENTRAS QUE LOS HOMBRES SUELEN REFUGIARSE EN LA COMIDA.

Para enfrentar este período de forma tranquila y pausada, sigue los consejos de Carolina de Bianchi, Psicóloga Infantil y de Adultos de la Universidad Gabriela Mistral y Magíster en Psicoterapia Breve Estratégica (Instagram: @caroladb.psicologa).

¿Qué es el estrés y por qué tiende a incrementarse en estas fechas?

El estrés es una tensión física y emocional, vivenciada como ansiedad y angustia, provocada por una reacción del organismo a un desafío, demanda, situación o pensamiento, que puede ser de carácter transitorio o permanente. Un estado que se exacerba en esta época del año como consecuencia de la sobrecarga social, laboral o educativa y que obliga muchas veces a ver varios temas en simultáneo y rendir al máximo, incluso, más allá de las capacidades.

¿Qué se puede hacer para enfrentar este período en perfecto equilibrio?

Lo primero es mantener una rutina de autocuidado, que se preocupe -por ejemplo- de continuar con una dieta balanceada, conservar una adecuada higiene del sueño y dejar tiempo para las actividades recreativas, de ocio y deportivas.

También es fundamental priorizar de manera realista las metas y objetivos a cumplir y discernir entre las instancias a las que se debe y quiere asistir, aprender a decir que no cuando corresponda y también delegar si se necesita.

Para no angustiarse por temas económicos, lo ideal es elaborar un presupuesto acotado para los regalos, celebraciones de fin de año y las vacaciones y tener en cuenta que nada es perfecto y que el estrés en sí mismo no malo, siempre y cuando se dosifique y sirva para activarse e impulsar el logro de propósitos.

SEGÚN UNA INVESTIGACIÓN DE LA CLÍNICA CLEVELAND, DE ESTADOS UNIDOS, EL ESTRÉS DE FIN DE AÑO SE TOMA COMO ALGO QUE NO SE PUEDE MODIFICAR, GENERANDO GRANDES EXPECTATIVAS, LLENANDO DE ANSIEDAD E, INCLUSO, CONDUCIENDO A ESTADOS DE DEPRESIÓN, SI ES QUE NO SE SABE MANEJAR

Fíjate en las señales

Para diferenciar los síntomas a tiempo, la especialista sugiere estar atenta a los siguientes signos que pueden derivar en un cuadro de angustia mayor:

• Desórdenes alimenticios.
• Ansiedad y desmotivación.
• Sensación de fatiga y cansancio extremo.
• Insomnio y problemas de memoria.
• Dolores de cabeza, espalda y cuerpo en general.
• Falta de libido.
• Irritabilidad.