¿Sabías que el 50% de los chilenos que padece hipertensión arterial no lo sabe?

La hipertensión arterial es una condición que se manifiesta con el aumento de la presión que ejerce la sangre sobre las arterias de forma crónica. Muchas veces esta patología es asintomática, por lo que la mayoría de las personas no tienen idea que la padecen y no son diagnosticadas a tiempo.

Según el Doctor Franco Utili, Jefe del Servicio de Urgencia de Clínica Vespucio, los riesgos de la presión alta son potentes. “El organismo empieza a tener más presión de lo que debiera ser y va dañando diversos órganos como la cabeza y ojos. El daño puede ser irreparable”, explica, por lo que puede generarse desde un infarto cerebral a un infarto cardíaco o insuficiencia renal.

¿Quiénes tienen más posibilidad de sufrir hipertensión arterial?

-Las personas obesas.
-Las personas con altos grados de estrés y ansiedad.
-Las personas que beben demasiado alcohol.
-Las personas que consumen demasiada sal en la dieta.
-Las personas con antecedentes familiares de hipertensión arterial.
-Las personas que sufren diabetes.
-Las personas que fuman.

¿Cómo leer nuestra presión arterial?

Lo primero que debemos tener claro, es la diferencia entre sístole y diástole. La sístole y la diástole son dos etapas del ciclo cardíaco. La sístole es la fase de contracción del corazón, donde la sangre es bombeada a los vasos, y la diástole es la fase de relajación, que permite que la sangre entre en el corazón.

En un adulto normal, el promedio de la presión sistólica es de 120 milímetros de mercurio (mmHg), mientras que la diastólica es de 80 mmHg. En el cuadro de referencia podemos estar atentos a nuestra presión, si es mayor a la cifra recomendada, debemos tomar precauciones pues hablamos de hipertensión.

¿Qué podemos hacer al respecto?

Lo importante es siempre la prevención, por lo que desde los 18 años es necesario realizar evaluaciones periódicas para conocer tu presión arterial y, por supuesto:

-Controlar el peso corporal.
-Realizar actividad física.  
-Consumir lo mínimo de sal.
-Llevar una dieta saludable alta en frutas y verduras.
-Evitar el tabaco y el alcohol.

*Cualquier duda consulta a tu médico.